Calmar a su bebé antes de acostarlo puede ser un desafío, pero con las técnicas adecuadas, puede crear un ambiente relajante que facilite el sueño.
A continuación se muestran algunas técnicas efectivas, explicadas paso a paso:
El contacto piel con piel es una de las formas más efectivas de calmar a un bebé, esta técnica no solo ayuda a reducir el llanto sino que también promueve la relajación y fortalece el vínculo entre tú y tu bebé.
Pasos:
Preparar el ambiente:
Elige un ambiente tranquilo y confortable, asegúrate de que la temperatura ambiente sea agradable para ambos.
Quitarle la ropa al bebé:
Desnuda al bebé, dejándolo solo con el pañal, también puedes quitarle tu propia prenda superior, utilizando una camiseta o blusa abierta para facilitar el contacto.
Coloque al bebé:
Sostenga al bebé contra su pecho, permitiendo que su piel toque la de él, mantenga al bebé en una posición cómoda y segura.
Mantenerse en contacto:
Permanece así por unos 20 a 30 minutos, o mientras el bebé se sienta cómodo, durante este tiempo puedes hablarle suavemente, cantar o simplemente disfrutar del momento de calma.
Un masaje suave puede ser una técnica maravillosa para relajar a su bebé, especialmente si se combina con una canción de cuna de fondo.
Pasos:
Elige el momento adecuado:
Masajear antes de acostarse, después del baño o cuando el bebé esté tranquilo.
Preparar el ambiente:
Ponga una canción de cuna suave y use un aceite o loción para bebés apropiados.
Coloque al bebé:
Coloque al bebé boca arriba sobre una superficie segura y cómoda.
Iniciar el masaje:
Comience con las piernas, haciendo movimientos circulares suaves, masajee el abdomen con movimientos circulares en el sentido de las agujas del reloj para ayudar con la digestión.
Pasar a brazos y manos, con suaves movimientos hacia adelante y hacia atrás, masajear el pecho con movimientos circulares.
Termine masajeando la espalda del bebé, si se siente cómodo acostado boca abajo.
El movimiento es una técnica reconfortante que puede ayudar a muchos bebés a relajarse y conciliar el sueño.
Pasos:
Elige el tipo de movimiento:
Prueba a mecerlo o caminarlo suavemente con el bebé en brazos, también puedes utilizar una mecedora.
Sostenga al bebé de forma segura:
Asegúrese de que el bebé esté bien sostenido en sus brazos o en un portabebés.
Combinar con música de cuna:
Ponga una canción de cuna suave o cántele a su bebé mientras lo mueve.
Mantenga el movimiento constante:
Mécelo suave y rítmicamente, sin movimientos bruscos, continúa hasta notar que el bebé está relajado y comienza a conciliar el sueño.
Consistencia: Sé constante con estas técnicas e incorpóralas a la rutina nocturna de tu bebé.
Signos de fatiga: Preste atención a los signos de cansancio de su bebé y comience estas técnicas antes de que se canse demasiado o se irrite.
Ambiente: Mantener el ambiente tranquilo, con luces tenues y el mínimo ruido, para facilitar la relajación.
Implementar estas técnicas puede transformar la hora de acostarse en un momento tranquilo y reconfortante tanto para usted como para su bebé.